AGENCIA/www.notimina.com
La lectura del mensaje político de Don Nicolás Reyes Álvarez, pronunciado el pasado viernes 21 de los corrientes en la explanada del Palacio Municipal de Minatitlán, llena al máximo por ciudadanos de los diferentes estratos sociales de la población, tiene muchos temas que rescatar y analizar para obtener una conclusión objetiva de lo realizado en su primer año de gobierno.
Como ya es sabido, toda alternancia se da siempre en condiciones adversas, y para la nueva comuna no fue la excepción, sobre todo cuando el poder se traslada a personas de distinta filiación partidista, diferente ideología y de contrarios intereses. Desde las inconsistencias en el proceso de entrega-recepción se originaron muchos problemas para la administración municipal actual en ejercicio de sus funciones. Esta falta de coordinación y voluntad política del gobierno saliente -que se resistió a entregar de acuerdo a los lineamientos legales- causó un verdadero caos al nuevo gobierno. La administración entrante tuvo entonces que generar su propio sistema operativo, en virtud de que carecía de información esencial de las principales áreas del Ayuntamiento, lo que propició durante el primer semestre del año pérdida de tiempo y lentitud en la prestación de servicios a la ciudadanía.
Por otro lado, el parque vehicular fue recibido en estado más que deplorable, con sólo 4 camiones recolectores de basura, y los pocos vehículos que se encontraron para las diferentes direcciones presentaban diversas fallas mecánicas y estaban prácticamente en el abandono por falta de un programa de mantenimiento integral. Personal del gobierno actual tuvo que rescatar partes utilizables de vehículos abandonados para reconstruir dos unidades de Limpia Pública que fueron incorporadas al servicio de la ciudadanía. Y así como esta acción irresponsable de dejar en el deterioro bienes comprados con dinero del pueblo, son muchos los casos que se deben desterrar de la administración pública.
Las deudas y laudos perdidos o sin atender significaron una merma muy considerable a las finanzas y forman parte de la herencia recibida por la administración municipal en funciones. Fueron varios millones de pesos que la administración entrante tuvo que erogar, so pena de pagar con cárcel por desacato. De esta forma el Alcalde y sus ediles no tuvieron más alternativa que someterse al imperio de la ley.
Con un esquema de una severa austeridad y racionando al máximo los recursos por indicaciones del ejecutivo municipal, Tesorería y la Comisión de Hacienda lograron estabilizar las finanzas municipales. Predicando con el ejemplo, Reyes Álvarez, quien no compró ni una sola cortina para la oficina de la presidencia, implantó la tónica de su gobierno. Vino entonces la disciplina y optimización de los recursos por parte de su equipo cercano de colaboradores.
Don Nicolás logró -por fin- que los ediles, directores, coordinadores y personal en general comprendieran que los recursos del pueblo no son para dilapidarlos como se hizo en las últimas administraciones. Como resultado de esta estrategia en este primer año se cubrieron todos los pagos de impuestos, pagos a proveedores, liquidación de deudas y desde noviembre ya estaba provisionado el recurso para el pago de Aguinaldos y las nóminas de fin de año, por lo que no fue necesario solicitar préstamos al gobierno estatal como en otros casos.
Se cumplió también y cabalmente con las obligaciones fiscales financieras, logrando la recuperación de 14 millones de pesos por concepto de ISR participable. Al hacer mención de lo anterior durante la lectura de su informe y visiblemente emocionado, el Alcalde, Don Nicolás Reyes Álvarez, no tuvo empacho en reconocer que ha puesto en práctica en la Administración Municipal su filosofía de vida fincada en la integridad, y remarcó que en su gobierno no se aceptan los errores de deshonestidad, porque esos avergüenzan y ofenden al pueblo.
En este año el Ayuntamiento no contrató un solo crédito, es decir no se endeudó ni se endeudará, según afirmó categórico el Alcalde la mañana del pasado viernes durante el acto solemne de rendición de cuentas de cara a la población.
La lectura del documento donde se centran las principales líneas de acción del año que fenece, revela que el ejercicio financiero se realizó con responsabilidad y eficacia por parte de la Tesorería bajo la supervisión directa de Don Nicolás Reyes Álvarez.
Durante este 2018 el Alcalde sentó las bases para lo que seguro será uno de los mejores gobiernos municipales en la historia de la ciudad. Optó el municipe por adquirir un parque vehicular -que no existía- para servir mejor a los minatitlecos y asi evitar poco a poco el despilfarro con la renta de volteos y maquinaria pesada, como se venía estilando en comunas anteriores. Con esto se entiende que hasta donde sea posible el Ayuntamiento evitará derrochar el dinero en el pago de los servicios rentados del parque vehicular y de cualquier otro bien.
Prefirió el Presidente en este primer año sacrificar obras para invertir mas de 46 millones de pesos en la adquisición de unidades que permitirán el mejoramiento de los servicios públicos, entre las que se encuentran 8 camiones recolectores de basura, una grúa para atender con prontitud la demanda de alumbrado público, una motoconformadora para el mantenimiento de los caminos de la zona rural, 2 retroexcavadoras y 4 camiones de volteo de 14 metros cúbicos. Este paquete de adquisiciones es un hecho inédito dentro del primer año de gobierno de los ayuntamientos locales.
Estás acciones también contribuyen a una responsable administración del presupuesto, ya que se busca un mejor rendimiento del dinero del pueblo, y con ello se evitará el dispendio en la renta de este tipo de vehículos.
En la misma línea se invirtieron más de 117 millones de pesos en obras de infraestructura sanitaria e hidráulica en colonias urbanas, así como obras de electrificación y caminos para la zona rural.
Fue prioridad para don Nicolás en este primer año de su gobierno no sólo poner orden en las finanzas, sino controlar con mano dura el manejo del dinero, y esto se tradujo en mejores servicios públicos para el pueblo.
Otro de los aciertos por el buen manejo de las finanzas fue el incremento de un 8 por ciento en la recaudación doméstica y la reducción de un 5 por ciento en el gasto corriente, lo que permitió optimizar recursos y pagar los compromisos financieros en tiempo y forma.
Se manejó de manera eficaz el uso del combustible, aplicando sistemas de control para erradicar vicios del pasado. En este sentido la gasolina, por ejemplo, dejó de suministrarse de forma irresponsable y solo se despacha a vehículos oficiales. Por instrucciones del Alcalde a las unidades particulares de ediles o directores no se les provee combustible, ni a ningún vehículo ajeno al ayuntamiento, pues éste se paga con dinero del pueblo y se está consciente que no se debe desviar para favorecer a particulares.
De igual manera en la administración de Reyes Álvarez no se realiza ninguna transacción económica sin justificación y sin su factura correspondiente, de tal forma que los pagos por debajo de la mesa y disimulos -tan socorridos en los ayuntamientos- son prácticas erradicadas en la administración del veterano luchador social.
El mérito del primer Alcalde surgido de MORENA, fue lograr que los ediles y sus colaboradores entendieran que este gobierno sí es de cambio. Que jamás va a propiciar o solapar algún acto deshonesto o de corrupción.
Transcurren los últimos días de los primeros 12 meses de lucha, sin tregua, contra viejos y viciados esquemas de gobierno, para avanzar en su ideal de gobernar reduciendo al máximo la corrupción.
Algún día Don Nicolás Reyes Álvarez al hablar de su anhelo de disminuir a cero los índices de corrupción en su gobierno, declaró a la prensa: «Parece difícil, pero no imposible».
Y en otro momento señaló que la honestidad es una virtud en el servicio público, pero que en su caso era como un gran estorbo que molesta a muchos.
Al menos en su primer año el Alcalde minatitleco ha sentado las bases para lograr un gobierno eficiente, ha enviado la lectura a propios y extraños que con él no hay de tantas sopas. Quien no lo entienda así en su círculo de colaboradores de confianza sus días están contados.
Don Nicolás Reyes Alvarez ha demostrado en estos primeros 365 días que están terminando, que se pueden dar mejores resultados a la población sin el flagelo de la corrupción y que es lo que Minatitlán necesita y espera.
Durante el 2019 el Ayuntamiento dará mejores y mayores resultados, con un mejor equipamiento en sus más demandantes áreas y con el ahorro que ello implica vendrán otro tipo de obras y acciones que permitan tener un mejor equipamiento urbano tanto en la ciudad como en el campo.
«Reconozco las carencias que aún existen en este municipio, un lugar que ha sido saqueado, dejado en el abandono, pero hemos iniciado ya los trabajos que permitirán a todos los minatitlecos recibir los beneficios que trae la correcta administración de los recursos», expresó en tono enérgico el alcalde en la recta final de su mensaje.
Dijo que en Minatitlán la Cuarta Transformación inició justo cuando hace un año el pueblo decidió por un cambio de régimen, y externó que a la fuerza del gobierno municipal se suma la fortaleza del gobierno del ingeniero Cuitláhuac García Jiménez de quién dijo, «manda obedeciendo la voz de la sociedad y quién seguro será un aliado de los minatitlecos».
Emocionado y motivado por la entusiasta presencia de cientos de ciudadanos que llenaron la explanada del palacio municipal y quienes aprobaban con nutridos aplausos sus palabras, Don Nicolás Reyes Álvarez dijo que el futuro es prometedor para Minatitlán, «pues contamos con la mano amiga del licenciado Andrés Manuel López Obrador, hombre que se ha distinguido por honrar su palabra y quién cumplirá con las obras que la población necesita», enfatizó en tono convincente.
El informe de Gobierno de Don Nicolás Reyes Álvarez ha generado confianza entre los ciudadanos del municipio, porque ha entregado buenas cuentas. La población demanda en todo el país que se acaben los latrocinios, los abusos del poder, el saqueo a las arcas del pueblo.
Pero sobre todo recibir los beneficios de una correcta aplicación de los recursos, esos que en los últimos años le han sido despojados a esta noble tierra.
Y estas exigencias, en Minatitlán están satisfechas en la persona de Don Nicolás Reyes Álvarez.