AGENCIAS
Durante este pasado fin de semana, 48 millones de personas jugaron a la vez a Pokémon Go en todo el mundo. Una cifra monstruosa a la que no se acerca ni un otro juego en la historia, ni siquiera el ultrapopular World of Warcraft. Es como si toda la población de Colombia hubiera decidido ponerse a hacer lo mismo a la vez.
Toda esta avalancha de jugadores hizo que los servidores de Nintendo quedaran inutilizados y no pudieron digerir tanta sobrecarga de trabajo. Y todo por culpa de una serie de circunstancias especiales: en gran parte de los 26 países en los que Pokñemon Go está disponible, hizo buen tiempo, lo que que hizo que los jugadores se tiraran a las calles en busca de estos simpáticos monstruitos.
Para quien no lo sepa -no paran de salir noticias sobre Pokémon Go- este videojuego es una app para Android y iPhone que permite atrapar pokémons con la cámara del móvil: para hacerlo, hay que ir explorando el mundo real y en determoinadas ubicaciones- por ejemplo, una plaza o un monumento- aparecen estos bichos. Para capturarlos, hay que apuntar con la cámara del teléfono y lanzar una pokebola. Una vez recogidos, pueden ser llevados a gimnasios pokémon -también situados en lugares emblemáticos de las ciudades- para ser entrenados y luego ser utilizados en luchas contra otros pokémons de otros usuarios.
Niantic, la compañía que ha desarrollado el juego, asegura en un comunicado que“Debido a la increíble cantidad de descargas de Pokémon, algunos entrenadores están encontrando problemas de conexión. No os preocupéis, nuestro equipo está trabajando en ello”.
El grupo de hackers PoodleCorp se ha responsabilizado de la caída de los servidores, un extremo que no ha sido confirmado ni por Niantic ni por Nintendo, y al que tampoco hay que hacer mucho caso: la enorme cantidad de usuarios que están jugando a la vez es suficiente motivo para que el servicio se vea afectado.
La locura Pokémon se extiende por Estados Unidos y por Europa. En Central Park, en Nueva York, se ha podido ver este fin de semana a hordas de jugadores intentando capturar a alguno de los monstruitos. Se produjo tal acumulación de gente que la policía tuvo que intervenir.
Por su parte, este fin de semana se han producido varios robos de teléfonos móviles en la ciudad inglesa de Manchester. Al parecer, las víctimas eran adolescentes que iban jugando a Pokémon Go, circunstancia que fue aprovechada por los ladrones para arrancarles el aparato de las manos e irse corriendo. La policía local ha lanzado una advertencia en Twitter para que los jóvenes no bajen la guardia cuando tengan la app abierta.