Asegura el encargado del rastro municipal; Ascencio Chigo Santos.
Alba Guzmán/www.notimina.com
Minatitlán, Ver.-Aunque se reporta un cierre de año con una matanza a la baja, confían que el sacrificio del ganado bovino se incremente el próximo 23 de diciembre en vísperas a la celebración de la cena de navidad o el fin de año, asegurando que se mantendrá el precio de la carne de res.
Afirmó el encargado Ascencio Chigo Santos tras recordar que el rastro municipal no laborará los días 24 y 25 de diciembre, reanudando actividades hasta el 26 de diciembre y el mismo descanso se aplicará para los días 31 de diciembre y 1 de enero de 2016.
“Esperemos que realmente la situación mejore en los próximos días, estamos al 50% de la matanza, que en años anteriores”.
Recordó que hace un par de años, en estas fechas, la matanza a la semana era de 500 reses en el rastro municipal, cuando ahora sólo están matando entre 200 a 250. Al rastro municipal, le ha pegado la crisis económica por la que atraviesa el país, al grado que la población sustituye la carne de res, por otros alimentos, o bien, recurren al tradicional pavo, bacalao, romeritos, o quienes son de escasos ingresos, el pollo. Afortunadamente la producción ganadera no se encuentra afectada por ninguna enfermedad, esto gracias a los inspectores que verifican la calidad de la carne de res.
En otro orden de ideas, el responsable del rastro municipal, indicó que este año tampoco se pudo consolidar el proyecto de regularizar la matanza de cerdos en el municipio de Minatitlán, sobre todo en esta temporada cuando se incrementa el consumo de cerdo y el sacrificio de estos animales se hace en los hogares sin ninguna inspección sanitaria.
Indicó que la matanza de ganado porcino en el rastro municipal no sería muy costosa para los tablajeros, ya que el sacrificio de cada animal les representaría un costo de aproximadamente 100 pesos, aunado a que garantizaría al ciudadano que está llevando a su mesa, carne de calidad.
Finalmente dijo que la carne de res se mantendré entre los 120 a 130 pesos el kilogramo, confiando que el ajuste en el precio se mantenga hasta concluir el año.